martes, 27 de septiembre de 2011

Me gustas...

Me gustas...


... Pero no sé qué hacer, son tantas las variables y posibilidades de combinatorias de eventos, caminos, estrategias que ninguna fórmula matemática dentro de mi cabeza podría resolver. Racionalizando no sé logra nada, pero cuando te dejas llevar las cosas suceden aunque por lo general el vacío se siento mayor a posteriori, así cómo un simple parche que se desprendió. 

Cuánto más piensas en el objeto deseado te das cuenta cuánto simbolismo hay en juego, cuánto simbolismo interfiere para consolidar algo tan simple como el amor hacía esa persona. Solemos a diario demostrar amor hasta con extraños, con la gentileza, con el respeto, con la ayuda, con tus familiares, con tus amigos, pero, ¿por qué tan difícil puede ser acercarse, generar un vínculo con aquella persona? ¿por qué es tan fácil hacerlo con alguien que no estimula tu sistema límbico? 

Cuántas cosas pasan por tu cabeza cuando otras voces te dicen "el que no busca no encuentra", "el que no se las juega, no gana" o, la que crea la paradoja "eso llega solo". ¡Ja! Paradojas, paradojas por todas partes. Creo que racionalizando y generando ideas sólo construyes ilusiones que aumenta el deseo, pero te atrapan en tu mente, cayendo casi en psicosis paranoica (exagerando la expresión obviamente), no hay salida si no cruzas el río. 

La segunda gran paradoja es "esperar ha hacer algo o esperar a que ella haga algo", dar señales parece la clave en este mundo simbólico en que todo se construye por símbolos que reemplazan los sentimientos, las acciones y bloquean, a veces, las emociones, pues el "lo que quiero hacer" versus "lo que socialmente se debe hacer". Y así un sinfín de secuencias lógicas que invaden tu mente o mí gran procesador, que al final te cohíben de todo acto y simplemente te dejan el deseo como una cáncer que crece y se dispersa por tu psiquis. No hay fórmula que describa y pueda dar solución, no hay algo que pueda romper esa red de pensamientos, simplemente el consuelo de palabras de George Harrison, "el mundo sigue con o sin ti", por lo que me pregunto ¿qué hago en él? lo dejo seguir o hago algo por encontrarlo, nuevamente quedo atrapado por la paradoja descrita con anterioridad.

O quizás simplemente sea un idiota que no tiene compatibilidad....


*texto producido por Simón Michell y el staff de fromdistantearth.blogspot.com, todos los derechos reservados.


1 comentario:

Raquel dijo...

primero me gustaria decirte que me ha encantado el video con la cancion, y k esta muy bien escrito, creo k te has expresado a la perfeccion contando, relatando la verdader esencia del mundo...
segundo, si tienes el don para expresarte con tanta claridad, para expresar al mundo la verdad, no creo bajo ningun concepto que seas idiota.
y tercero, las paradojas, no tienen nunca una solución, sigo sin saber k decirle, k contestarle, sigo si saber k contarle...